De nuevo tenemos entre nosotros, disculpadme por la asiduidad a este periódico y a este tema, un conflictillo de nada.
La iglesia católica hace un llamamiento para la objeción de conciencia hacia la nueva asignatura de Educación para la Ciudadanía. Sinceramente, yo no sé de que va esta nueva asignatura, más allá de lo que se ha comentado por ahi. Dicen que va a tratar de los Derechos Humanos, de la Constitución Española, y que la van a impartir filósofos e historiadores.
Así de principio, una asignatura dedicada a hablar de estos temas no debería generar ningún problema, siempre que quienes den clase no manipulen, y dejen que cada alumno genere su propia opinión al respecto. Pero obviamente, este indicio de librepensamiento jeringa sobremanera a la iglesia. Yo lo veo lógico, quieren seguir manteniendo ese predominio sobre la creación del pensamiento de las nuevas generaciones, porque, sin clientes, se les acaba el negocio. Por otra parte, se aferran al maldito concordato que hace que un país soberano como España tenga que pactar las reformas educativas con otro país soberano, la dictadura teocrática más conocida como Ciudad del Vaticano. En ningún país civilizado que se precie se tiene que pactar la educación con unos extranjeros, pero Spain is different, como siempre.
La sombra de la iglesia es alargada, porque afecta, como de costumbre, a PP y afines, véase Concapa, "FAES y de las Jons", Foro de la Familia, Asociación de víctimas del terrorismo, etc.
El peligro según la Conferencia Episcopal es que el estado influya en la educación moral de los futuros ciudadanos.
No soy experto traductor, pero voy a intentar poner esto en el lenguaje normal y corriente: "nos irrita mucho que el estado vaya a quitarnos el negociazo de manipular la mente de los chiquillos para que en un futuro se conviertan en personas de bien, es decir, racistas, xenófobos, intolerantes, homófobos, antisocialistas, apostólicos y romanos".
Creo que más o menos he conseguido explicarlo bien.
Si alguno quiere mirar la noticia mas a fondo, este es el enlace.
La iglesia católica hace un llamamiento para la objeción de conciencia hacia la nueva asignatura de Educación para la Ciudadanía. Sinceramente, yo no sé de que va esta nueva asignatura, más allá de lo que se ha comentado por ahi. Dicen que va a tratar de los Derechos Humanos, de la Constitución Española, y que la van a impartir filósofos e historiadores.
Así de principio, una asignatura dedicada a hablar de estos temas no debería generar ningún problema, siempre que quienes den clase no manipulen, y dejen que cada alumno genere su propia opinión al respecto. Pero obviamente, este indicio de librepensamiento jeringa sobremanera a la iglesia. Yo lo veo lógico, quieren seguir manteniendo ese predominio sobre la creación del pensamiento de las nuevas generaciones, porque, sin clientes, se les acaba el negocio. Por otra parte, se aferran al maldito concordato que hace que un país soberano como España tenga que pactar las reformas educativas con otro país soberano, la dictadura teocrática más conocida como Ciudad del Vaticano. En ningún país civilizado que se precie se tiene que pactar la educación con unos extranjeros, pero Spain is different, como siempre.
La sombra de la iglesia es alargada, porque afecta, como de costumbre, a PP y afines, véase Concapa, "FAES y de las Jons", Foro de la Familia, Asociación de víctimas del terrorismo, etc.
El peligro según la Conferencia Episcopal es que el estado influya en la educación moral de los futuros ciudadanos.
No soy experto traductor, pero voy a intentar poner esto en el lenguaje normal y corriente: "nos irrita mucho que el estado vaya a quitarnos el negociazo de manipular la mente de los chiquillos para que en un futuro se conviertan en personas de bien, es decir, racistas, xenófobos, intolerantes, homófobos, antisocialistas, apostólicos y romanos".
Creo que más o menos he conseguido explicarlo bien.
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